El tamaño importa: ¿Por qué elegir una furgoneta pequeña?

Escribe: Carlos Vara

Me compré mi furgoneta pequeña apenas hace un año. Practico surf desde hace unos 4 y skate desde hace alguno más. Gracias a esto tuve mis primeros contactos con las furgos camper. Quise tener una desde que me invitaron a comer unas patatas guisadas en una T3 Wesfalia en el festival de surf de Salinas hace dos años. Me pareció una auténtica pasada. Yo sabía que cocinaría mis patatas guisadas en mi furgo algún día. Desde que tengo mi furgoneta pequeña, son algunas las veces las que me han hecho la siguiente pregunta: pero tío, ya que te metes… métete bien! ¿Por qué no te pillaste una furgo… una FURGO? Pues bueno, mi argumentario suele ir por aquí:

Uso diario y consumo de una furgoneta pequeña

Furgoneta pequeña

Por mucho que me enamorase de aquella Volkswagen T3 Westfalia, mi furgo también tenía que servirme para un uso diario normal. Es decir, para ir a trabajar, para ir a comprar, para recados… en fin, para todo.

No me imaginaba moviendo todos los días algo del tamaño de una Transporter o similar y no me podía permitir un segundo vehículo. Además vivo en un barrio de Madrid y el consumo urbano de una de esas me desplumaría en un plis-plas!

Puntos a favor importantes también son el aparcamiento y maniobrabilidad de mi Volkswagen Caddy. Es muy cómodo conducir una de estas por dónde sea. Como suelo decir, sólo es un coche alto.

Es un refugio.

Furgoneta pequeña

Está muy claro que en una minicamper no vas a poder estar tan cómodo como en una furgo grande. El espacio es el que es y da para lo que da. A mí me ha dado para una cama de 1,90×1,30 m, un par de arcones y una mesita. Mi furgoneta pequeña es como un refugio. Supongo que esto es importante en función de lo largas sean tus escapadas y de cuánto tiempo vayas a pasar dentro de la furgo.

Limitaciones de espacio en una furgo pequeña

Furgoneta pequeña

No tengo segunda batería ni instalación eléctrica que me permita aclimatar la furgo según necesidades de frío o calor. No tengo fregadero ni tengo WC. Tampoco nevera ¡Ay la nevera! ¿Podría tenerlos? Supongo que sí. Pero tendría que renunciar a bastante del espacio que no me sobra. Para cocinar, llevo un camping gas de doble fuego y llevo una garrafa con grifo y una ducha a bomba portátil que me hace el apaño para fregar y ducharme bastante bien.

Y bueno, lo del wc es el punto que más improvisación requiere… Baños públicos, pedir algo en un bar, un rinconcito apartado en el campo… De mis chismes electrónicos, la mayoría por se cargan por USB, tengo un par de baterías portátiles y no me ha hecho falta más mientras las mantenga cargadas cuando esté en movimiento.

Todo es de quita y pon en dos segundos. Sin instalación ni homologaciones. Esa la parte buena.

Lo importante es saber para qué la quieres

Furgoneta pequeña
Foto: Pep Nevat

Es bastante simple. Tener una mini-camper es mucho más económico y son perfectas para un uso cotidiano en la cuidad pero a la hora de la escapada, comodidades las justitas.

Para mí, lo importante antes de comprarte cualquier furgo, grande o pequeña, es saber cuáles son tus necesidades, el uso que le darás y cuánta pasta quieres/puedes estar invirtiendo en ella. Si tienes una furgoneta pequeña o estás pensando en hacerte con una, puedes compartir tus inquietudes en el grupo de Facebook Mini-campers.

Galería de fotos