Atomic Camper: Un cohete sobre ruedas

    El exterior de la atomic camper.

    Un accidente de avión, un año y medio de recuperación y un hombre con un sueño en la cabeza han sido los elementos necesarios para el nacimiento de Atomic Camper, la caravana más original que hemos visto en mucho tiempo.

    Dos años para construir una caravana atómica

    Las ventanas parecen de submarino en la caravana atómica

    El hombre es Bill Guernsey. Originario de Alaska, Bill realizaba un viaje por el país, cuando un accidente de avión lo dejó con siete costillas rotas y la espalda destrozada. Ante el pronóstico de un año y medio sin trabaja, Guernsey decidió que era el momento para hacer realidad un proyecto: construir desde cero una caravana inspirada en la era atómica y el steampunk. Un vehículo que le transportase a las décadas de 1950 y ’60, a la época de la Guerra Fría y la Carrera espacial.

    Partiendo de un esqueleto de madera, con un proceso similar al que se usa para hacer barcos, el artesano creó la original forma ovalada de la Atomic Camper, que recubrió con láminas de madera, fibra de vidrio y papel maché. Dos años después, durante los que trabajó seis horas al día seis días a la semana, había terminado este cohete rojo sobre ruedas, propulsado por energía solar (cuenta con dos paneles que suministran toda la energía que necesita).

    Estética steampunk y decoración de la época

    No falta detalle en la atomic camper.

    Pese a su reducido tamaño (4,8 metros de largo), la Atomic Camper cuenta con un baño completo, ducha, una cocina de gas, diversos espacios de almacenamiento y dos bancos acolchados que permiten a una persona adulta dormir sobre ellos. Pero la magia de esta caravana reside en los detalles. En las peores etapas de su rehabilitación, Bill se centró en pequeños trabajos que podía realizar sentado o de pie quieto y en los que de otra manera no se habría fijado tanto. Así podemos ver indicadores de temperatura de estética retrofuturista, tiradores hechos con piezas de máquinas, objetos de colección, robots y hasta una pistola láser dentro de la caravana. Estos detalles junto con la cuidadosamente seleccionada decoración que incluye recortes de periódicos y fotografías de la época son los que la convierten en una cápsula temporal.

    La Atomic Camper ya ha encontrado dueños y puedes seguir sus aventuras aquí. Pero Bill ya tiene en mente su próximo proyecto: una camper zeppelin. Síguele la pista, ¡ésta podría ser tuya!