Convivir con el COVID en la desescalada

convivir con el COVID en la desescalada

Por fin, vemos la luz con un plan de desconfinamiento. Ahora tenemos que aprender a convivir con el COVID en la desescalada.

Poco a poco, volvemos a tener libertad de movimiento y en unos días podremos volver a disfrutar de nuestras casitas con ruedas. Bueno, ¡algunas son mucho más que casitas! Bromas aparte, debemos ser conscientes de que no hay que perder el respeto al COVID-19. Lo que debemos hacer es intentar convivir con el virus hasta que llegue la ansiada vacuna. 

Por supuesto, tenemos que poner medios y mantener unas medidas higiénico sanitarias óptimas para intentar no contagiarnos, pero tampoco tenemos que llevarlo al extremo. En estos momentos la salud mental es primordial y necesitamos que funcione al 100% y que no se nos funda ningún fusible. 

Hay muchas formas para intentar llevarlo lo mejor posible, pero yo os voy a explicar en las siguientes líneas alguna de las más importantes.

Claves para convivir con el COVID

  • Mantener la calma. No hay que llevar esta situación al extremo pensando que el mundo se va a acabar. Tenemos que ser OPTIMISTAS y aceptar que esta es un escenario pasajero que acabará pronto. 
  • Debemos MANTENER UNA RUTINA, pero sin estresarnos consiguiendo que el tiempo pase un poquito más rápido. 
  • No tenemos que dejar nunca de lado una DIETA SALUDABLE, EJERCICIO, HIGIENE, etc. Ahora que podemos salir a realizar deporte no hay que sobrepasar el límite. Si nunca andamos o hacemos running no debemos intentar el primer día conseguir hacer 10km. Esta práctica no es buena, debemos aumentar los km ́s y el tiempo de MANERA PROGRESIVA, día a día. 
  • Si padecemos algún tipo de enfermedad crónica (HTA, diabetes, dislipemia, etc.) tenemos que seguir con la adherencia al tratamiento. En caso de encontrarnos mal o creer que el tratamiento no nos hace efecto que debería poneros en contacto con vuestro médico de atención primaria y le comentáis el caso, pero ¡NUNCA DEJÉIS EL TRATAMIENTO POR INICIATIVA PROPIA! 

No todo son cosas malas. Ya podemos ir a la naturaleza a disfrutar de un paseo al sol con la familia y, en unos días, con los amigos. La temperatura acompaña, el sol está radiante hasta casi las diez de la noche y nosotros con muchas ganas de recuperar el moreno perdido del verano pasado. Para conseguirlo, hacemos caso omiso a todos los consejos exponiendo a la piel débil a los primeros rayos de sol sin protección alguna. ¡Error! Cuando salgamos a pasear, debemos de echarnos crema de sol para protegernos del envejecimiento excesivo de la piel o de los futuros cánceres de piel que pueda acarrear el exceso de exposición al sol. 

La luz del sol es buena para la obtención de la vitamina D que ayuda a absorber el calcio, principal componente en los huesos de los humanos. Pero, en ningún caso, el exceso o la carencia de vitamina D son buenos y los valores recomendados son diferentes en cada persona según edad y sexo. 

Animo a todo el mundo a seguir con sus proyectos, la vida sigue y no la podemos dejar escapar. Pronto volveremos a cruzarnos por las carreteras y charlar de nuestros sueños, que algún día seguro que se convierten en realidad si ponemos empeño y trabajo. ¡Mucha fuerza ruteros!